¿CÓMO MOTIVAR A TU EQUIPO DE TRABAJO?
Introducción
La rutina, los afanes cotidianos, la monotonía, la frustración, incluso las noticias diarias del mundo pueden llevar a tu equipo de trabajo a estados permanentes de desmotivación, estancamiento y pasividad laboral, afectando el ambiente de trabajo y el cumplimiento de los objetivos propuestos.
Antes que nada, los trabajadores de tu empresa son seres humanos, personas con sentimientos y emociones, que buscan al final de cuentas sentirse inspirados, motivados y encontrar el sentido a su existencia.
El trabajo no está exento de ello, ya que allí pasan la mayor parte de sus vidas.
¿Qué estrategias puedes utilizar para mejorar el ambiente laboral? ¿Cómo lograr que tu equipo de trabajo permanezca motivado con las intenciones correctas?
A continuación hablaremos de algunas de las acciones que puedes tomar para motivar a que tu equipo de trabajo recupere la senda, cumpla los objetivos y que por encima de todo, sientan que están en el lugar correcto cumpliendo un proyecto de vida inmejorable.
El cambio empieza por uno mismo
Es imposible motivar a otros si el mismo líder se siente desmotivado.
Cuando hablas con una persona percibes gestos, palabras y actitudes. Puedes decir: ¡Ánimo muchachos, todo va a mejorar!, pero transmitir todo lo contrario con tu rostro triste, los hombros caídos y un tono de voz alicaído y tenue.
Los trabajadores en tu empresa esperan ser motivados por medio de tu ejemplo, jamás a través de amenazas o intimidación.
Un mal líder genera ambientes tóxicos, causando miedo en sus empleados, diciéndoles por ejemplo que perderán su trabajo si no cumplen un objetivo determinado. ¿Quién quiere quedarse en un entorno así?
Pregúntate primero, ¿qué debo cambiar en mi liderazgo? Tal vez necesites escuchar más y no ‘suponer’ o creer que lo sabes todo acerca de tus trabajadores.
Quizá tienen circunstancias personales que están afectando a su trabajo. Por cierto, no se trata de que te conviertas en una especie de consejero o psicólogo, sin embargo, permanecer distante te impedirá llegar al meollo del problema de desmotivación de tu empresa.
Más que diversión
Ten cuidado, crear una atmósfera saludable no se trata de ‘divertir’ a las personas para que no se aburran. Si la gente quiere pasar un buen rato, tal vez escogerán un lugar más divertido como una sala de cine o un concierto.
Ellos no esperan que seas un bufón que hace chistes todo el tiempo o que organiza fiestas permanentes a expensas de la empresa.
Un buen empleado busca inspiración, un propósito, un sentido de vida. Cuando logra comprender que es importante en ese lugar y que su labor es útil, su trabajo le aportará ese sentido de logro que ninguna diversión pasajera podrá imitar.
¿Crees que tus empleados necesitan zonas de esparcimiento, café, video juegos o tiempo para hacer algo de ejercicio? Si está en las posibilidades de la empresa, bienvenidas estas opciones.
Sin embargo, debes guiar a tus trabajadores a que se cuestionen acerca de por qué quieren trabajar en la empresa, ¿qué los motiva? Si la única razón que dan es ‘ganar dinero’, en realidad están desmotivados.
Incentivos y premios
Si les quieres obsequiar algo, haz que lo ganen, que compitan por ello.
Así sucede con los niños, por ejemplo. Cuando les regalas muchas cosas sin motivo alguno, los estás educando para ser personas perezosas, sin motivación alguna, sin una razón para vivir.
¿Qué tal pequeños retos que incentiven la sana competencia? El premio puede ser una cena, un diploma, una salida a un parque de diversiones. No tiene que ser dinero.
El reconocimiento, la aceptación, el elogio, son necesidades del ser humano que pueden ser más poderosas que un aumento de salario.
Es lo que en la actualidad se conoce como el ‘salario emocional’ y se trata de satisfacer estas necesidades de su fuero interior, que pueden ayudarles a sentirse mejor acerca de sí mismos.
Otros premios podrían ser un día libre, recibir una capacitación, tener un horario flexible o trabajar desde casa. La gente está tan ocupada hoy día que valoran llegar a casa antes de tiempo y poder descansar.
Sentido de valía
¿Cómo se siente tu empleado? ¿Se cree uno más del montón o se siente valorado?
Cuando un trabajador se siente como un número más buscará tarde o temprano irse de ese lugar. Esto puede ocurrir en las grandes organizaciones en donde hay tantos trabajadores que si uno se va nadie se da cuenta.
Es importante que el trabajador sienta que su labor en la empresa es muy importante, que su trabajo hace la diferencia. Por supuesto, en la justa medida y proporción, no se trata de felicitar a personas a cada momento y sin motivo alguno.
Por otro lado, de nada sirve decirle a tu empleado: ‘eres muy importante para nosotros’, y pagarle un mal sueldo, eso demostrará falta de coherencia.
Como habíamos anotado antes, la gente no se motiva exclusivamente con dinero, pero si recibe una buena remuneración, podrá haber un mejor ambiente para mejorar y crecer.
Apóyalos para que conquisten sus sueños
Hay vida más allá de la empresa.
Los trabajadores tienen anhelos personales, sueños que tal vez no se han atrevido a compartir ni a su familia y mucho menos en su entorno laboral.
Una buena estrategia para conocer los sueños de tus empleados es organizar talleres, con apoyo de sicólogos, con el fin de compartir, dar rienda suelta a la imaginación y soñar.
Los sueños serán como un combustible que encenderá la llama de su motivación, verán un norte y lo que hagan volverá a tener sentido.
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